La organización remarcó que estos crímenes no prescriben y sostiene que Uruguay tiene una deuda persistente con la verdad y la justicia en este tema.
La organización de derechos humanos reconoce que luego de hacerse pública la confesión de Gavazzo el presidente Vázquez ordenó el 1 de abril enviar a la Fiscalía General de la Nación los testimonios de los tres exmilitares condenados por crímenes cometidos durante la dictadura.
Pero Amnistía Internacional dice que ante esta confesión inédita demanda una vez más a las autoridades uruguayas que adopten de inmediato todas las medidas necesarias para llevar ante la justicia a todas las personas sospechosas de responsabilidad penal por crímenes de derecho internacional, incluidos los crímenes de lesa humanidad, sin importar en la fecha que fueron cometidos.
Amnistía recuerda al estado uruguayo, incluida la Suprema Corte de Justicia, que los crímenes de lesa humanidad son imprescriptibles, tal como lo establece la Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes de Guerra y de Lesa Humanidad, de la que Uruguay es estado parte.
El comunicado de la organización finaliza diciendo que Uruguay debe saldar su deuda persistente con respecto a la verdad, la justicia y las garantías de no repetición de los crímenes del pasado, los que se encuentran impunes hasta el presente.