Semanas atrás nuestro país autorizó la comercialización de vino desalcoholizado y con baja graduación alcohólica, lo que habilita su importación y producción.
Recordemos que, desde 2015, Uruguay modificó la Ley de Tránsito y Seguridad Vial, que establece que toda persona habilitada para conducir vehículos deberá tener cero alcohol en sangre.
¿Es este vino una solución para aquellos que quieran tomar y manejar?
Lo conversamos con el presidente del Instituto Nacional de Vitinicultura y enólogo, Ricardo Cabrera.