El país balcánico recibió 250.000 personas en los últimos siete meses, un 700% más que en 2014.
El ministro de Estado de Grecia llamó a una cumbre internacional para tratar la crisis migratoria que vive su país, al que llegaron 250.000 personas en siete meses, un aumento de 700% en comparación con el mismo período del 2014. Afirmó que la cuestión de los refugiados no tiene que ver solo con Grecia si no con el mundo entero.
El lunes se abrió un campo de refugiados cerca del centro de Atenas, y el ministro griego afirmó que es una muestra de que el país puede responder a las necesidades humanitarias a pesar de la crisis financiera que atraviesa. Tiene una serie de casas prefabricadas equipadas con aire acondicionado y baño y actualmente aloja a 250 personas. Su capacidad es de 700.
Allí funciona también el servicio de acogida en el que se puede transmitir el asilo, ya que los refugiados están escapando de las guerras en el norte de África y de Afganistán. La mayoría llega de un campamento improvisado que habían establecido y en el que no tenían, como ahora, ayuda de ONGs y la Cruz Roja Internacional.