El infectólogo consideró que no es esperable que haya una vacuna antes de fin de año y que conviene que las personas reduzcan su círculo de interacciones.
El Grupo Asesor de Científicos Honorarios aseguró que «el desconfinamiento avanzado trae consigo el riesgo de brotes» del nuevo coronavirus, en alusión al último brote registrado en la Médica Uruguaya. Desde que comenzó la pandemia hubo «seis brotes importantes, todos con contagios puertas adentro. Hay que hacer uso responsable de los espacios públicos y ventilar espacios cerrados». Vamos a ver cómo avanza la situación por estas horas, en cuanto tiempo se puede tener controlados los brotes y si hay circulación comunitaria del virus.
Estamos en una etapa de vigilancia y alerta. Vamos a tenernos que mantener así. Los números van aumentando a medida que aumenta la interacción humana. Los casos activos y la aparición de brotes más grandes. Lo interhospitalario era previsible. Ha habido casos a nivel mundial. Hay mucha interacción entre hospitales. El virus ha sido muy eficiente. Los hospitales se podrían volver expansores.
Si no se mide el cumplimiento de los protocolos, no se entera. Llamaba a que todos diseñaran indicadores claros para que cuantificaran. Si se mide qué tan bien se hace la higiene hospitalaria, de manos y el uso de protección personal; se puede medir. No basta solo pensar que se hace todo bien. No puedo cuantificar ni evaluar qué ha pasado en las instituciones. Hay instituciones que sí sé que están midiendo.
Multiempleo médico
Es una variable que la comunidad médica ha tenido en cuenta. Hace muchos años cuenta. Era una debilidad en el país. No sabíamos cuánto podía impactar, pero es bastante caprichosa y uno se da cuenta en la medida que los hechos suceden.
Uruguay tiene muchas herramientas. Será una conjunción de muchas cosas que nos pondrán en alerta. Se mira desde múltiples ángulos: si el porcentaje de test positivos empieza a aumentar, si la cantidad de pacientes que se identifican positivos sin nexos epidemiológicos aumenta, si aparecen brotes en distintos puntos del país también es una señal. El número por sí solo no es indicativo. También la disponibilidad de camas en CTI es indicativa.
Rumbo
Hay que mirar la frontera. Está siendo exitoso el monitoreo. Se están captando pacientes que antes no. Hay pacientes que no son uruguayos, simplemente son pacientes que entraron y los diagnosticaron. No hay nada que haga pensar que hay que dar un paso atrás o no abrir las cosas que ya están programadas.
Hay cosas que ya sabemos del virus que es que se transmite rápidamente en espacios cerrados. En Twitter analizaron tres brotes: uno en un parque, otro en un espacio cerrado y otro en un espacio cerrado más chico, de 60 m2. Hubo casos en los tres, pero en los espacios más abiertos hubo menos casos. Es una hipótesis muy razonable para ver dónde está el riesgo. Los espacios más abiertos donde la interacción es menor, el riesgo es menor. Nunca es cero el riesgo. Los uruguayos seguimos susceptibles.
Cada ciudadano se tiene que preguntar: ¿cuál es el riesgo al que me someto al participar de esta actividad? No importa la actividad, hay que pensar cuál es el riesgo.
La cantidad de virus al que estamos expuestos es muy importante. A veces los brotes familiares son graves. En fin, lo importante es la carga que recibo y eso está atado al uso de la máscara. La cantidad y el tiempo de exposición a partículas virales hacen que el riesgo sea más grave.
El uso de la máscara, que tiene que ser por encima de la nariz y debajo del mentón, su correcto uso es importante.
Vacuna
La comunidad científica está entusiasmada por una vacuna. Antes de fin de año es difícil. Lo dice la OMS. Una cosa es la fase de desarrollo y otra la producción en masa y distribución.
De aquí a que vayan a la policlínica zonal y ponga el brazo, hay un gran trecho. Pienso que en Uruguay no habrá vacuna este año.
Vuelta a la normalidad
No parece sensato pensarlo tan rápidamente. La normalidad como la conocíamos no está cerca de volver.
Elecciones municipales
Es mucho tiempo para predecir qué puede pasar. Si se mantiene este escenario, con el cuidado se podrá saber. Eso pasará por el estudio del GACH. Siete semanas es mucho para una epidemia como el coronavirus.
En Uruguay no tenemos un fármaco antiviral que podamos recetar. En principio se usó hidroxicloroquina pero ahora no más. El remdesivir es un fármaco que ha demostrado mejoría clínica en los pacientes. Lo que uno espera de los fármacos es que baje la mortalidad. Lo que podemos hacer es dar buena asistencia a los pacientes, también el nivel de oxigenación. Después tenemos el banco de plasma con el que podemos actuar. Lo otro que estamos usando es la dexametazona, que es un corticoide.
Seguimiento epidemiológico
El promedio de cada positivo genera unos doce contactos. Imagínense el trabajo que da rastrearlos. Por eso hay que aumentar los rastreadores. La sociedad tiene que darse cuenta que la mejor forma que tiene es reducir su círculo social. Si uno interactúa demasiado, y sale un positivo, resulta que tiene 50 contactos para rastrear.