Teniendo en cuenta la complejidad de estas intervenciones y las condiciones sanitarias de la época, no se puede afirmar si estas prácticas fueron exitosas.
Un estudio descubrió lo que probablemente sea la primera cirugía oncológica de la historia. Y esto abre un nuevo capítulo en la medicina y en el estudio del cáncer.
El cáncer es una de las enfermedades más estudiadas por la ciencia, pero también es una de las que despierta más incógnitas. Incluso desde el Antiguo Egipto esta patología está bajo la lupa de la medicina.
Se encontraron dos cráneos que datan del tercer milenio A.C., entre los años 4.400 y 4.700, y se hallaron evidencias de lo que podría ser la primera operación para extirpar un tumor.
Se estima que uno de ellos pertenecía a una mujer mayor de 50 años que presentaba un cráter de gran tamaño, lo que podría ser una consecuencia del cáncer. Por las características del hueco, se trataría de una incisión que solo podía realizarse con un instrumento de precisión y afilado, algo así como un bisturí.
Además, se observó una lesión causada por el golpe de un arma punzante, que muestra signos de haberse curado, lo que significa que la mujer seguramente recibió algún tipo de tratamiento médico y sobrevivió.
El segundo cráneo es de un hombre de 30-35 años, donde se observó una lesión de gran tamaño compatible con una destrucción amplia del tejido óseo y alrededor unas 30 lesiones que corresponden a una metástasis. Lo sorprendente es que, alrededor de ellas, también encontraron numerosas marcas de cortes hechos con algún instrumento quirúrgico de precisión, afilado y fabricado con metal. Aunque en este caso resta identificar si se trata de una cirugía en vida o post mortem.
“Este hallazgo es una evidencia única de cómo la antigua medicina egipcia intentó abordar o explorar el cáncer hace más de 4.000 años”, expresó Edgard Camarós, paleontólogo de la Universidad de Santiago de Compostela y autor principal del estudio.
Teniendo en cuenta la complejidad de estas intervenciones y las condiciones sanitarias de la época, no se puede afirmar si estas prácticas fueron exitosas, pero el hecho de que supieran extirpar tumores es una muestra más de lo avanzada que estaba la medicina.
Con este descubrimiento sobre la mesa, la historia del cáncer viajaría 1000 años hacia atrás, dejando constancia de que se trata de una afección de todos los tiempos.