Durante su intervención en la sesión de la Organización de Estados Americanos, el canciller uruguayo, Omar Paganini, reclamó a Venezuela "respetar los derechos humanos, transparencia electoral y acatar la voluntad popular".
Una resolución que exigía a las autoridades de Venezuela publicar de inmediato las actas de las elecciones del domingo no alcanzó este miércoles los apoyos necesarios para ser aprobada por el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA). “Este organismo debería irse hoy muy avergonzado”, dijo al respecto el canciller uruguayo.
Durante su intervención en la sesión de la Organización de Estados Americanos, el canciller uruguayo, Omar Paganini, reclamó a Venezuela "respetar los derechos humanos, transparencia electoral y acatar la voluntad popular".
“Lamentamos que no se ha podido aprobar una resolución sobre este tema en este ámbito”, dijo Paganini, y agregó: “No comprendemos cómo no hay acuerdo sobre una resolución tan clara sobre temas tan básicos, que hacen a la legitimidad democrática y la protección de los derechos humanos. Este organismo debería irse hoy muy avergonzado”.
Con este escenario, Paganini señaló que “Uruguay reclama al gobierno de Venezuela el respeto mutuo y absoluto a los derechos humanos, la transparencia electoral y el pleno acatamiento de la voluntad popular”.
Además, pidió a los Estados integrantes de la OEA que abonen “esfuerzos para el pronto restablecimiento de la verdad, la paz y la democracia en Venezuela”.
La reunión extraordinaria de la OEA, con sede en Washington, fue convocada por los siete países cuyo personal diplomático fue expulsado de Venezuela tras los comicios -Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay-, así como Estados Unidos, Canadá, Ecuador, Paraguay y Guatemala. Tras más de cinco horas de negociaciones a puerta cerrada, se sometió a votación una resolución sobre Venezuela que contó con 17 votos a favor, ninguno en contra, 11 abstenciones y cinco ausencias, de manera que no logró el apoyo de la mayoría absoluta de los miembros del organismo panamericano necesario para ser aprobado.
Se abstuvieron países como Brasil y Colombia, y otros se ausentaron, como México.