Brasil arranca con el pie derecho su Copa del Mundo y queda como líder de su grupo.
La selección de Tité llega al Mundial como uno de los candidatos más importantes a llevarse la Copa. No sería sorpresa, ya que estamos hablando de una selección con asistencia perfecta en el evento a lo largo de su historia y, a la vez, el mayor ganador. Esta tarde el conjunto verdeamarelo disputó la Copa del Mundo por vigésimo segunda vez, sin haberse salteado ninguna. Se enfrentó a Serbia, una selección que, con este nombre, es considerablemente nueva en la Copa del Mundo y no ha tenido grandes resultados: no superó la fase de grupos en ninguna de las dos ediciones disputadas. Pero este país supo ser parte de Yugoslavia, país habitúe en el torneo y que llegó a lograr un cuarto puesto, logrado en el Mundial de Chile 1962, donde perdió en semifinales con Checoslovaquia y el tercer y cuarto puesto con los locales. Además, logró llegar a semifinales en la primera edición de la Copa del Mundo disputada en Uruguay, donde perdió el partido de semifinales ante los locales por 6 a 1.
Hoy, bajo el nombre de Serbia, se presentó en esta competición representado por figuras importantes del fútbol como el delantero de la Juventus, Dušan Vlahović; el mediocampista del Lazio, Sergej Milinković-Savić; y el capitán de la selección, mediocampista del Ajax, Dušan Tadić. Enfrente, todas estrellas mundiales, desde Neymar a Allisson.
El partido empezó a las 16 horas en el Estadio Lusail donde el juez del partido fue el iraní Alireza Faghani. La sorpresa dentro de las alineaciones iniciales fue la ausencia del delantero de la Juventus Dušan Vlahović, con la presencia en solitario de Aleksandar Mitrović como delantero central. El partido empezó tranquilo, sin mucho riesgo tomado por ninguno de los dos. El primero en generar fue Brasil, como era de esperar, atacando principalmente por el sector de Vinicius Jr, pero Serbia logró cerrar bien sus líneas como para que ningún ataque pase a mayores, tanto así que el golero serbio solo fue exigido dos veces. El primer tiempo se fue sin emociones ni grito sagrado.
En una de las primeras jugadas del primer tiempo y tras un pase comprometedor del golero Vanja Milinković-Savić, Raphina robó la pelota en el borde del área y logró definir, pero el arquero repuso su error con una buen atajada en la que, hasta el momento, fue la jugada más peligrosa del partido.
El gol llegó en el minuto 62' gracias una jugada típica de Vinicius Jr. amagando y confundiendo rivales, sacó un tiro inesperado y Richarlison aprovechó el rebote del golero. Pero con uno no le bastó: 10 minutos más tarde el número 9 volvió a recibir de Vinicius, la levantó e inventó una tijereta para hacer uno de los mejores goles de esta edición del Mundial.
El partido terminó 2 a 0 a favor de Brasil, que queda como líder del grupo junto a Suiza, rezagando a Camerún y Serbia al último puesto. La próxima fecha se disputará el 28 de noviembre, enfrentando a los de abajo y los de arriba entre sí.