El ex fiscal y senador del Partido Colorado se pronunció respecto a la propuesta de contemplar “la historia sexual” en las denuncias.
Me parecería impertinente que el juez me pregunte de qué color es mi ropa interior. Es lógico decirlo a un juez penal que va a emitir una sentencia de años seguramente.
Por otra parte, el ex fiscal y senador del Partido Colorado también opinó sobre el caso Besozzi, imputado por siete delitos de corrupción —a dos meses de las elecciones departamentales, en las que el dirigente busca la reelección en Soriano— y que generó cuestionamientos del Partido Nacional al funcionamiento de la Fiscalía.
De fondo, lo que subyace es un organismo al que el sistema político no logra encontrarle un titular —la actual fiscal de Corte subrogante, Mónica Ferrero, ocupa el cargo a la espera de que el Parlamento vote un nuevo nombre— y una reforma del Código del Proceso Penal, en 2017, que tampoco está exenta de críticas.
La Fiscalía tiene poder de fuego y debe ser reorganizada.
La predisposición de la fiscal a perder la objetividad tiene un manto sobre una causa que quizá sea cierta pero que la oscurece por una falta de previsión de la fiscal.