El cuervo

Luis fue contratado para refaccionar una vieja casa en medio de la campaña, pero no esperaba encontrar lo que había allí dentro.


El cuervo es un ave que está presente en muchos mitos y leyendas. Es así como podemos encontrarlo en algunos pasajes de las biblias, en la literatura griega o en el pagarismo germánico. Además existe una leyenda popular que dice que cuando alguien muere, los cuervos se llevan su alma al reino de los difuntos.

En una estancia del departamento de Cerro Largo existe un cuervo que se apoderó de la atención de los lugareños. Particularmente se trata de la estatua de piedra de un cuervo que está en la entrada de una vieja estancia. Cuentan que muchos enigmas y secretos se encuentran bajo su fría mirada. Curiosamente, ese campo se llama "El cuervo".

Luis, un joven empleado de la zona, fue contratado para trabajar allí. Poco después él mismo protagonizaría un encuentro inexplicable en la estancia. Es un lugar muy solitario, con pocos caminos. Un paraje ganadero tradicionalmente, aunque ahora se ve agricultura, y vinculado a la frontera. Luis Gama era un joven que se ganaba la vida honradamente haciendo "changuitas" de albañilería, plomería y construcción. Lo contrataron para refaccionar una estancia que estaba en ruinas. El que lo contrató era un hombre que había adquirido la propiedad en un remate judicial, por pocos pesos, como finca ruinosa. El dueño anterior se había muerto sin haberla ocupado nunca, aunque sí habían explotado los campos.

El casero del lugar le ofreció quedarse a dormir en el casillo del puesto , que le podía preparar el catre si así lo deseaba. Luis le dijo que no, que se quedaría en la estancia. El hombre le preguntó si estaba seguro y él le aseguró que sí, que estaba acostumbrado a dormir solo. El hombre le insistió y Luis le preguntó si había algún problema y el casero le dijo que sucedían cosas extrañas. Luis no creía en esas cosas.

Antes de dormir, Luis tomó un poco de caña, luego apagó la vela y se durmió. Estaba adormecido cuando sintió que le tiraban de las sábanas y luego el llanto de un niño que pedía auxilio. Recorrió la casa y encontró unas cortinas que volaban colgadas de la ventana y estaban manchadas de sangre. Luis decidió ir a tocarle la puerta al casero, para averiguar también si no era él el que estaba haciéndole una broma. Comenzó a abrir puertas, estaba seguro que la salida era en cierto sentido, pero solo encontraba puertas y más puertas. Le costó reconocer que estaba perdido, anduvo un buen tiempo así, abriendo más puertas y puertas. Y finalmente llegó al lugar donde estaba la cortina volando en aquel cuarto enorme. Allí comenzó a sentir el sollozo de una mujer, siguió a través del corredor y de golpe vio una sombra y una ráfaga de tiempo apaga una vela. Enloqueció y empezó a correr, abrió una puerta y estaba en el dormitorio donde había estado durmiendo. Ya había estado como tres veces en ese lugar así que se rindió y se empinó la botella de caña y no paró hasta que el cuerpo se rindió.

Se levantó furioso y se fue derecho a encarar al casero, que ya lo estaba esperando. Luis le sugirió que le había hecho pasar una noche mala, pero sin embargo el hombre le dijo que había dormido. Además le contó que por lo que él sabía esa casa la había construido una familia del Partido Nacional y después del triunfo de los colorados en la revolución del 97, se dice que los coroneles de los ejércitos iban saqueando casas en campaña y esa casa había sido víctima de un saqueo.