Si bien el testeo se hizo con fentanilo, el dispositivo también serviría para la anafilaxia o la epilepsia, y ya obtuvo las patentes para continuar su desarrollo
Un dispositivo que contrarresta los efectos del fentanilo. Esa es la nueva tecnología que se encuentra en pleno desarrollo para intentar mitigar los impactos de una droga que se ha vuelto un verdadero problema sanitario y social en lugares como Estados Unidos.
El fentanilo es una de las drogas que más ha ganado terreno en Estados Unidos, y además es una de las principales causas de muerte entre los 18 y 45 años; de hecho, en 2023 el 70% de las muertes por sobredosis se deben a esta droga de venta libre, con un total de 75.000 muertes en su haber.
Somnolencia, disminución de la frecuencia cardiaca y el descenso de los niveles de oxígeno en sangre es parte de la sintomatología de este opioide que, rápidamente, puede matar a una persona. Pero la naloxona puede revertir estos efectos.
Para esto, científicos crearon el naloxímetro, un dispositivo que detecta los síntomas, libera naloxona y se coloca bajo la piel, además de enviar señales al sistema de emergencias con la ubicación del dispositivo para socorrer a la persona con sobredosis.
El aparato tiene tres versiones: la primera libera naloxona en el tejido a través de canales microfluídicos, mientras que la segunda utiliza una aguja desplegable para inyectar el fármaco; por último, la tercera modalidad utiliza un catéter intravenoso para administrar el fármaco directamente en el torrente sanguíneo, aunque esta última aún se está evaluando por el desafío quirúrgico que implica.
De momento se ha testeado en roedores y cerdos. y el aparato detectó signos de sobredosis en menos de un minuto tras la caída de los niveles de oxígeno, y los animales se recuperaron completamente en un plazo de cinco minutos tras recibir la naloxona.
Si bien el testeo se hizo con fentanilo, el dispositivo también serviría para la anafilaxia o la epilepsia, y ya obtuvo las patentes para continuar su desarrollo