Maximiliano Olivera y Javier Méndez hablaron con la prensa presente en Río.
Luego de la dura derrota por 5-0 ante Botafogo por las semifinales de Copa Libertadores, el plantel de Peñarol se retiró tarde en la madrugada del Estadio Nilton Santos de Río de Janeiro. Dos de los futbolistas aurinegros hablaron con la prensa presente y dieron su visión sobre el juego y los errores, sobre lo que viene en la revancha y también acerca de los incidentes sucedidos más temprano el miércoles con la hinchada mirasol.
Después de una primera parte equilibrada, en la que los dos equipos tuvieron intensidad pero ciertas imprecisiones, en el complemento todo fue del local. El Aurinegro vivió una pesadilla en la segunda parte, en la que el equipo brasileño mostró todo su potencial y desequilibrio con Luiz Henrique, Savarino y Almada como puntos más destacados. En 45 minutos los dirigidos por Artur Jorge le convirtieron cinco goles a Peñarol: Savarino (51' y 59'), Barboza (55'), Luiz Enrique (73') e Igor Jesús (79') fueron los autores.
Luego del partido, Maximiliano Olivera dijo que en el segundo tiempo hubo “ocho minutos que fueron fatales”, en alusión a la seguidilla de goles.
“Las sensaciones son malas. Mucha tristeza, un golpe muy duro. La verdad que no le encontramos explicación. Fueron ocho minutos que nos mató el partido”, dijo en rueda de prensa en la que estaba Telemundo.
“Habíamos hecho un muy buen primer tiempo. En el segundo tiempo esos ocho minutos fueron como un golpe de knock out y después no pudimos reaccionar. Esos ocho minutos nos terminaron de liquidar”, agregó.
Botafogo goleó a Peñarol 5 a 0 por la semifinal de ida de la Libertadores
Finalmente, Olivera prefirió poner la mirada en lo que viene: el partido de vuelta en Montevideo, la próxima semana. “Ahora a corregir, a levantar cabeza, a tratar de preparar el otro partido, tratar de hacer lo posible para ganar allá y buscar el milagro”, apuntó.
Por su parte, el futbolista Javier Méndez también destacó lo hecho por Peñarol en el primer tiempo, y consideró que el “desajuste” que marcaron los goles del local fueron los que no debieron permitirse.
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“Hicimos un gran primer tiempo. En el segundo tiempo nos encontramos con el desajuste que sabíamos que no podía pasar, porque ellos son buenos en eso, si les dejás espacio tienen jugadores muy hábiles y rápidos. Ese desajuste que no podíamos tener nos costó caro”, dijo.
“La receta ahora está en trabajar y volverlo a intentar”, concluyó.
Los incidentes con la hinchada aurinegra y la llegada al estadio
El jugador aurinegro Maximiliano Olivera también habló sobre los incidentes ocurridos este miércoles al mediodía en Río de Janeiro, en el que varios hinchas de Peñarol protagonizaron incidentes con la Policía y parciales locales.
“Fue vergonzoso lo que vimos en el día, lo que vivió nuestra gente, fue toda una vergüenza la emboscada que le hizo la Policía junto a tres hinchas de Brasil. Eso fue lamentable. Y después a nosotros nos tomaron el pelo: dos horas de viaje para venir al estadio, llegamos tarde, una hora antes del partido, atrasaron solo 15 minutos el partido, nos tuvieron 25 minutos en la ruta sin decirnos por qué, a los 15-20 minutos pasó el ómnibus de Botafogo por el mismo lugar a 100 kilómetros por hora, y nosotros que íbamos por el mismo lugar no podíamos pasar”, apuntó.