"El órgano rector es el ministerio; el informe de impacto ambiental lo presenta la empresa y lo analizamos nosotros", indicó.
El proyecto para construir un complejo residencial de 29 edificios con 320 apartamentos en Punta Ballena (Maldonado) derivó en una serie de protestas de residentes y activistas el pasado domingo, poniendo al sitio en el punto de mira de las autoridades ambientales de Uruguay.
La construcción del complejo es en un punto emblemático de la costa de Maldonado, en pleno lomo de la ballena, como se conoce popularmente.
En cuanto se conoció el proyecto, vecinos y organizaciones iniciaron un camino de rechazo. Para esto, abrieron una página en change.org para pedir la expropiación del predio y en cuatro días alcanzaron más de 35.000 firmas.
Este martes, el ministro de Ambiente, Robert Bouvier, fue consultado al respecto y dijo que se está en etapa de consulta ciudadana. "Estamos hablando de terrenos privados, de una iniciativa privada que fue presentada ante el ministerio. Estamos dando el trámite que corresponde a ese tipo de proyectos y en esta primera etapa está a consideración ciudadana", expresó en rueda de prensa.
"Está colgado en nuestra web y se puede acceder, ya lo han hecho casi 6.000 personas. A su vez, ha habido reuniones en Punta Ballena, nos parece importante esta etapa de que la ciudadanía conozca lo que se va a hacer", comentó.
El secretario de Estado dijo además que después que termine el plazo de manifiesto van a tener una audiencia pública. "La gente hace sus aportes, nosotros tomamos en cuenta y después vamos a una audiencia pública donde quienes lleven adelante el proyecto explican a la ciudadanía cómo va a ser", expresó.
Bouvier indicó que al ser terrenos privados "tienen todo el derecho" a presentar el proyecto, pero el ministerio tiene que evaluarlo. "El órgano rector es el ministerio. El informe de impacto ambiental lo presenta la empresa y lo analizamos nosotros", añadió.
Por último, consultado sobre si va a haber destrucción del ecosistema, el ministro sostuvo que verán después de la consulta ciudadana y de la audiencia pública las consideraciones que tienen y ahí harán "el análisis que corresponde".
El uso de las tierras para el complejo atravesó un largo proceso legal, que data desde la dictadura. En ese momento, las autoridades usaron suelo de Punta Ballena para la construcción de una ruta panorámica y un recorrido turístico. Esto llevó a los herederos de Antonio Lussich, antiguos dueños del terreno, a un juicio que terminó con la devolución de 11 hectáreas, informó Infobae.
Pasado el tiempo y con el acuerdo con la Intendencia de Maldonado y ediles de todos los partidos, los herederos pactaron con inversionistas para levantar un complejo residencial.