Trascurridos dos años, durante todo el mes de febrero se abrió la posibilidad de que los usuarios pudieran optar por cualquier otra mutualista si así lo querían.
De los 33.780 exsocios de Casa de Galicia que estaban habilitados a cambiarse de las mutualistas preasignadas durante el mes de febrero, 2.798 efectivamente lo hicieron.
Desde el Ministerio de Salud Pública señalaron que esa situación constituye una señal muy positiva que marca que el mecanismo elegido para distribuir los usuarios en el marco del cierre de la exmutualista funcionó.
Después del cierre de Casa de Galicia, los 33.780 socios fueron redistribuidos entre cuatro prestadores preasignados: Círculo Católico, Sociedad Médica Universal, Hospital Evangélico y Centro Uruguayo de Asistencia Médica.
Trascurridos dos años, durante todo el mes de febrero se abrió la posibilidad de que los usuarios pudieran optar por cualquier otra mutualista si así lo querían; finalmente, menos de 3.000 lo hicieron.
“La valoración que hacemos es positiva del sistema de asignación de prestador, que había sido cuestionado injustamente, porque fue un sistema que se trabajó en conjunto con el Frente Amplio, que había establecido criterios claros, con una grilla con parámetros objetivos de distribución”, afirmó el subsecretario de Salud Pública, José Luis Satdjian.
