A cuatro años y medio de gestión, casi la mitad de la población sigue aprobando el desempeño presidencial.
El 47% de la población aprueba la gestión del presidente Luis Lacalle Pou y el 38% la desaprueba. A cuatro años y medio de gestión, casi la mitad de la población sigue aprobando el desempeño presidencial.
Las opiniones sobre cómo es la gestión del presidente influyen en la decisión de voto. Por eso, quienes hoy piensan votar al partido del presidente son los que están más conformes con su gestión: nueve de cada diez de quienes piensan votar al Partido Nacional aprueba el desempeño de Lacalle Pou, y también lo hacen casi nueve de cada diez votantes de otros partidos de la coalición. En cambio, entre quienes piensan votar a la oposición, más de siete de cada diez desaprueban la forma en que el presidente está conduciendo el país.
Los indecisos, que hoy son el 13%, tienen opiniones más divididas: una mayoría relativa, 45%, tiene una visión positiva sobre el desempeño de Lacalle Pou, el 30% una opinión negativa y el 25% neutra.
El presidente comenzó su gestión con una evaluación muy positiva y mucho apoyo por su manejo de la pandemia. Los juicios positivos bajaron gradualmente, mientras los juicios negativos aumentaban. A principios de este año había casi tantos juicios negativos como positivos, pero desde entonces la aprobación volvió a subir. Hoy la diferencia entre la proporción que aprueba y la proporción que desaprueba es de casi diez puntos.
Cuando se compara la evaluación del actual presidente con el de los anteriores a la misma altura de su gestión, se observa que Vázquez en 2009 tenía el apoyo del 64%, 17 puntos más que Lacalle, y Mujica en 2014 el apoyo del 56%, nueve puntos más que el actual presidente. Justo antes de que el Frente perdiera la elección de 2019, sólo el 34% aprobaba la gestión de Vázquez en su segunda presidencia. Lacalle con el 47% de aprobación está 13 puntos por encima de Vázquez.
Con este nivel de apoyo al gobierno, ¿cómo puede impactar en las elecciones? La evaluación de la gestión pesa en la decisión de voto, pero el presidente no es candidato. Siguen siendo más los satisfechos que los insatisfechos, pero también están quienes tienen una evaluación tibia, y esos podrían inclinarse hacia la coalición o hacia el Frente Amplio. Además de la evaluación del gobierno, en el voto de los indecisos pesan mucho los líderes, y en estas próximas semanas evaluarán cuál de ellos les parece que será mejor para conducir el país. Porque más allá de que estén conformes o desconformes con el actual presidente, su sucesor tendrá que demostrar que puede cumplir el papel igual o mejor.
Esta nota presenta los resultados de una encuesta nacional telefónica (a teléfonos fijos y celulares) de CIFRA en todo el país: 1001 entrevistados entre los días 17 y el 28 de julio de 2024.
