Teniendo en cuenta la adaptación de la ciudad y del levantamiento del tren-tram en sí mismo, la obra podría comenzar en el próximo período de gobierno.
El ministro de Transporte, José Luis Falero, explicó este viernes varios detalles sobre el proyecto al que el Poder Ejecutivo le dio el visto bueno para construir un "tren tranvía" que conecte la Plaza Independencia (Montevideo) con El Pinar (Canelones).
“El Poder Ejecutivo había recibido por parte de los gobiernos departamentales de Montevideo y Canelones, que tuvieron una reunión con el presidente de la República, su preocupación por la movilidad. En esa reunión hubo un planteo de que iban a presentar alguna propuesta para mejorar la movilidad, cosa que nosotros no tenemos hoy arriba de la mesa para poder estudiar”, recordó Falero, y consideró que el proyecto que recibieron “ayuda a la preocupación de las intendencias”.
¿Qué se propone, en concreto? La construcción de un “tren-tram” que tenga una ruta de unos 35 kilómetros, mayoritariamente sobre la superficie, que incluya unas 33 paradas, además de estaciones terminales.
“Esta iniciativa incluye la incorporación de nueva tecnología, de un sistema de tren-tram que agiliza y reduce los tiempos de distancia casi en un 50%. Entendemos que es una iniciativa interesante como para que después de haberla estudiando nuestro equipo de técnicos en el ministerio estábamos en condiciones de enviársela al presidente como para que quede aprobada, que tiene un proyecto ambicioso y moderno”, dijo Falero.
En tanto, el ministro remarcó que un punto “importante” para el gobierno es que este proyecto “genera una reducción importante de CO2 -dióxido de carbono”, cercana a las 9.000 toneladas por año. “Eso nos motivó porque puede generar también un ahorro en el subsidio al boleto que hoy tenemos en el gasoil. El gobierno nacional se involucra porque hay una ecuación de una inversión que puede generar ahorros”, apuntó Falero.
Con una inversión cercana a los US$500 millones, “cada pasaje va a llevar 174 personas, que son tres ómnibus, que van a estar circulando en uno solo”. “Para que esas 174 personas se trasladen tiene que haber estaciones donde se puede traspasar el pasaje del transporte tradicional al tren-tram”, indicó Falero, y por eso deslizó que una posibilidad “perfectamente válida” sería incluirlo en el Sistema de Transporte Metropolitano (STM).
Otras infraestructuras necesarias
Más allá del tren-tram en sí, tanto Montevideo como Canelones deberán adaptarse a nivel de infraestructura para recibir esta nueva modalidad de transporte. Así lo explicó el ingeniero Carlos González, asesor del ministerio.
“Ellos plantean la necesidad de áreas terminales y para la transferencia. En Ciudad Vieja plantean dos o tres alternativas en predios algunos públicos que podrían discutirse, como la zona de la terminal de AFE o algún otro espacio público en Ciudad Vieja necesitado de ser revalorizado”, indicó González, y agregó: “Por eso es importante trabajar con la intendencia”.
Teniendo en cuenta la adaptación de la ciudad y del levantamiento del tren-tram en sí mismo, la obra podría comenzar en el próximo período de gobierno, estimó González.
“Dada la definición que han presentado, y dependiendo de la voluntad política, podría empezarse a trabajar en el próximo período”, dijo, y agregó: “Como obra, es por superficie y no es compleja, lo más complicado pueden ser las terminales, y algunos espacios de parques de mantenimiento e intercambio de unidades”.
Negociación con Montevideo, Canelones y empresas de transporte
Tras el visto bueno del gobierno, ahora comienza una “segunda etapa” crucial, explicó el ministro Falero.
“Ahora viene la etapa de notificar a los gobiernos departamentales y buscar el involucramiento de los técnicos de todas las partes para trabajar en la segunda etapa, que sea ya un proyecto más específico”, apuntó.
En ese sentido, Falero indicó que se trata de “un proyecto muy bien presentado”, pero ahora la etapa fundamental que queda es “el intercambio institucional entre el gobierno nacional y los departamentales”. “Queremos que se sumen porque este tipo de proyectos pueden tener variables de acuerdo a la percepción local y territorial. Queremos el involucramiento para que en caso de surgir modificaciones puedan ser contempladas en esas instancias de intercambio”, dijo.
Además, también en esa instancia deberá estar sobre la mesa el financiamiento. “Hay ahorros en distintos aspectos, como mejoramientos en lo ambiental y del subsidio de combustible. Es un aporte del Estado y de privados. Hay una estimación de que un porcentaje sería de las intendencias, otro del gobierno nacional y otro del costo de la operativa del boleto mismo”, apuntó.
En ese escenario también será “importante” que las empresas que actualmente operan líneas de transporte en Montevideo y Canelones se sumen al intercambio. Incluso, dijo Falero, con la posibilidad de que sean ellas las que se encarguen de la operativa del tren-tram.
“Si la línea la operan quienes la construyan o no va a depender de la instancia que se va a iniciar ahora. No necesariamente tienen por qué operarla. Pueden hacer la obra y la pueden operar los transportes públicos que hoy tenemos. No hay nada que esté condicionado. Acá no hay nada rígido de que venga alguien a proponer y querer empoderarse de la operativa. No. La operativa puede estar interactuando con las actuales empresas de transporte urbano. Creo que ese es uno de los temas a analizar con las intendencias y las empresas de transporte. La operativa es tener un nuevo sistema de transporte con complementariedad”, afirmó.
Con esto, Falero reafirmó que los tiempos de concreción de la obra dependerán de cómo se den las negociaciones con las diferentes partes. “Los tiempos no son nada rígidos. Empieza la etapa de interactuar con el territorio. Es indispensable la buena voluntad de los gobiernos departamentales para comenzar a interactuar. No creo que esto sea un proyecto que se pueda resolver en forma rápida, no sería conveniente. Cuando las cosas son innovadoras y no habituales, tienen que tener un estudio en profundidad de todas las partes”, valoró.
“Todo lo que sirva para que esto se analice en profundidad va a tener el beneplácito del ministerio. Hay un vínculo ya con los técnicos de la intendencia y del ministerio por el Ferrocarril Central y otros temas”, agregó.
El costo del boleto del tren-tram
Tanto Falero como el ingeniero González coincidieron es que es muy prematuro hablar de un posible costo del boleto que podría tener este tren-tram. Sin embargo, ambos coincidieron en que debería ser asequible para la población uruguaya.
“El monto del boleto va a depender de la voluntad de los gobiernos en cuanto al subsidio. Y es nuestra voluntad no modificar ni que se encarezca, si se puede reducir mejor. Tenemos que darle mayor agilidad. Muchas veces demoran más de El Pinar a Montevideo que lo que yo demoro de San José a Montevideo”, dijo Falero.
Por su parte, González explicó que “la propuesta del privado, en la medida que la presenta en este grado de definición, es porque cree que es compatible con la realidad del país”.
“Estos negocios en el mundo funcionan porque se financian con el propio boleto, en otros porque se subsidian de forma parcial y en otros el Estado hace la inversión y encarga la operativa”, agregó.