La tradición devenida en deporte nacional desde 2006 tiene un arraigo de mucho más de un siglo.
Este año se cumplen 100 años de las primeras jineteadas en la Criolla de Montevideo, pero la tradición devenida en deporte nacional desde 2006 tiene un arraigo de mucho más de un siglo.
"Es un deporte y es un espectáculo con muchísima gente que lo sigue. Hoy en la actualidad los caballos son como cualquier caballo de deporte con sanidad, comida y bienestar permanente", explicó Dalton Delgado capataz del ruedo del Prado.
¿Cómo se identifica un caballo adecuado para las jineteadas? El tropillero Maximiliano López comentó que son caballos "más rebeldes" con "otro orgullo".
La preparación del caballo lleva mucho tiempo. "No es que uno enlaza un caballo y lo lleva a la Criolla porque ahí se perjudica al animal, nosotros trabajamos todos los días con los caballos", agregó López.
Los caballos de jineteadas viven más de 20 años y empiezan sus primeras jineteadas cerca de los cuatro. Anualmente tienen entre ocho y diez montas que duran un máximo de diez segundos cada una.
La confección de un reglamento nacional de jineteadas que fue puesto en suspenso recientemente y el pedido de prohibición de este deporte por parte de animalistas, ponen sobre la mesa el costado polémico de esta tradición.
La estadística señala que menos del 1% de los animales sufren lesiones de gravedad o fatales. "La primera preocupación empieza antes del evento", indicó la veterinaria Nadia Crosignani. "Lo que sucede fuera del ruego y dentro del ruedo también son enormes preocupaciones veterinarias", añadió.