"Tenías razón, él está vivo": a 50 años del accidente de los Andes la esposa de Canessa contó cómo se enteró que él había sobrevivido

Este octubre se cumplen 50 años del accidente aeronáutico.

Este miércoles 12 de octubre se cumple medio siglo desde que un avión de la Fuerza Aérea uruguaya despegó del Aeropuerto de Carrasco. Viajaban 45 personas, y varios de los pasajeros eran integrantes del equipo de rugby Old Christians, que iba a Chile para disputar un amistoso. Ese encuentro nunca tuvo lugar, porque la aeronave cayó en los Andes un día después, el 13 de octubre. Luego de más de 70 días, se encontró a 16 sobrevivientes del accidente. Uno de ellos es el hoy médico Roberto Canessa, quien con su entonces compañero de equipo Fernando Parrado fueron los encargados de dejar el campamento en la montaña para dar con alguien que los ayudara. Y lo consiguieron.

Hoy, 50 años después, Canessa -reconocido cardiólogo infantil- contó en el programa Desayunos Informales que una de las "escenas más maravillosas" que le dejó la experiencia fue cuando su novia, Laura Surraco, se enteró que él estaba vivo.

Surraco -entonces de 19 años, al igual que Canessa- recordó que ese día de diciembre de 1972 cuando llegó la noticia de que habían encontrado a dos uruguayos cuyas identidades todavía se desconocían su madre le dijo: "Llegó el día, aparecieron dos".

Al ritmo de las comunicaciones de ese momento, las horas pasaban y no se revelaba quiénes eran los sobrevivientes. "Mi papá me prometió que si había noticias me iba a despertar y me dio una pastillita", dijo Surraco, quien contó qué pasó a la mañana siguiente: "Recuerdo que alguien me sentó en la cama, llorando, y me decía ‘tu tenías razón, él está vivo’".

"Me fui a la casa de su mamá, que también estaba con todo el barrio alrededor, y nos fuimos a Chile esa mañana", dijo.

¿Cómo fue el reencuentro con su novio? "Te creés que vas a tener un cuento de Walt Disney, y nada que ver", dijo entre risas. Canessa estaba "en su camita del hospital, todo flaquito, le salía sangre de los labios, las manos parecían largas de tan flaco que estaba. Una voz toda finitita. Me cambiaron el novio", relató.

Para ese momento, la historia de los uruguayos que habían sobrevivido en los Andes daba vuelta al mundo y las caras de Canessa y Parrado -los dos primeros en aparecer con vida- estaban en las tapas de todos los diarios. "Yo quería la vidita de antes, y ahora me toca este famoso.  Y después me di cuenta que yo lloraba cuando estaba muerto y ahora que estaba vivo estaba llorando y no tenía que quejarme más", dijo Surraco, mientras su esposo la escuchaba con lágrimas de emoción sentado a su lado.

A su turno, Canessa fue consultado acerca de qué pensaba tras oír cómo su esposa pasó esos meses en los que él estuvo ausente. "Qué coraje, qué huevos, de no haber defraudado a mis amigos, de haberlo hecho por nosotros mismos. Ese orgullo mueve montañas. Depende de vos la vida", respondió.