Los traslados se dieron un total de 12 veces sin ninguna autorización judicial.
La Fiscalía de Delitos Económicos y Complejo de Segundo Turno, a cargo del fiscal Ricardo Lackner, formalizó la investigación contra un capitán de la Guardia Republicana “por reiterados delitos de abuso de funciones”, por haber dispuesto en 12 oportunidades el traslado del narcotraficante mexicano Gerardo González Valencia a la Jefatura de Policía de Montevideo sin existir orden judicial pertinente.
Según pudo saber Telemundo, esos traslados serían para visitar al mafioso italiano Rocco Morabito en la Cárcel Central que funciona en la Jefatura. Sin embargo, el capitán de la Republicana que disponía los traslados y los efectivizaba, argumentó que se hacían en el marco de visitas conyugales; no obstante, desde Fiscalía apuntan que el lugar donde estaba alojado González Valencia tenía las condiciones para recibir allí esas visitas.
Cada traslado de González Valencia costaba $94.000, “porque había que movilizar unas tanquetas y disponer varias medidas de seguridad”, informaron desde Fiscalía.
Además, se probó que este capitán de la Republicana adquirió un teléfono satelital con el que González Valencia se comunicó con México en varias oportunidades.
Para este caso, el fiscal solicitó prisión preventiva. Pero la jueza dispuso arresto domiciliario total, con el uso de tobillera, y la prohibición de comunicación con otros integrantes de la fuerza. La jueza argumentó que, por el tiempo transcurrido, la persona no se iba a fugar e iba a estar a disposición de la investigación.
Los casos de González Valencia y Morabito
El narcotraficante mexicano González Valencia integraba el cartel de Jalisco y fue detenido en Uruguay en 2016. Tras cumplir más de dos años de prisión preventiva por lavado de activos había sido excarcelado porque podía estar en libertad provisional. Sin embargo, continuó en la cárcel como medida cautelar a la espera de la extradición.
Bajo un fuerte operativo de seguridad, González Valencia fue extraditado a Estados Unidos en mayo de 2020.
Sin embargo, la causa por lavado de activos en Uruguay no terminó, porque hay acusación fiscal, pero falta la sentencia definitiva sobre su responsabilidad y sobre el destino de los bienes confiscados.
Por su parte, el mafioso italiano Rocco Morabito se fugó de la Cárcel Central, en pleno Centro de Montevideo, en junio de 2019 junto a otros tres reclusos -Ezequiel Díaz, Matías Acosta y Leonardo Sinopoli-. La Policía uruguaya logró recapturar a todos menos al italiano, que huyó a Brasil.
En mayo de 2021 Morabito -considerado uno de los jefes de la mafia de Calabria, la denominada 'Ndrangheta- fue capturado en la ciudad brasileña de Joao Pessoa. A principios de julio de este año, en tanto, llegó a Italia tras haber sido extraditado por Brasil.